Las autoridades en Indonesia frustraron un intento de transporte ilegal de más de 200 perros destinados al sacrificio y la venta de su carne en Semarang, Java, donde el consumo de este tipo de carne está prohibido. Los perros fueron encontrados en condiciones deplorables dentro del camión, con sus patas atadas y bocas amordazadas. Gracias a la rápida acción de activistas y denuncias en redes sociales, se logró rescatar a 226 perros.
La intervención llevó a la detención de cinco personas involucradas en el transporte de los animales, quienes ahora enfrentan acusaciones de maltrato animal y podrían ser condenadas a hasta cinco años de prisión. Este caso destaca la importancia de la lucha contra el maltrato animal y establece un precedente en el país.
A pesar de que Indonesia aún permite la venta de carne de perro y gato, la oposición a esta práctica está creciendo. Las campañas en contra han ganado fuerza, y algunas ciudades, como Semarang, han implementado prohibiciones locales al comercio de carne de animales domésticos en los últimos años.