Las agencias de inteligencia del gobierno de Estados Unidos han llegado a la conclusión de que es «probable» que el presidente ruso, Vladímir Putin, no haya ordenado la muerte del opositor ruso Alexéi Navalni, según informes de medios estadounidenses publicados este sábado.
Sin embargo, los oficiales estadounidenses no han logrado determinar la causa de la muerte de Navalni en febrero pasado, según detallaron estos medios.
Según un informe distribuido en varias agencias gubernamentales de EE.UU., como reporta el diario The Wall Street Journal, no se exonera a Putin de culpa, pero se afirma que él no fue quien directamente ordenó el asesinato del opositor.
Posición del presidente Joe Biden
El presidente Joe Biden, por otro lado, culpó directamente a Putin por la muerte de Navalni, y su gobierno impuso varias sanciones a Rusia en respuesta.
Durante una conferencia de prensa, a Biden se le preguntó si consideraba que la muerte del opositor ruso fue un «asesinato», a lo que respondió: «No sabemos exactamente qué sucedió, pero no hay duda de que la muerte de Navalni es el resultado de las acciones de Putin y sus secuaces».
Según los servicios penitenciarios rusos, Navalni, de 47 años, murió después de sentirse mal tras dar un paseo en la cárcel donde estaba detenido y, aunque los servicios médicos intentaron reanimarlo «durante más de media hora», finalmente perdió la vida.
En diciembre del año pasado, Navalni fue trasladado desde una cárcel en la región de Vladímir, a menos de 200 kilómetros de Moscú, hasta una prisión en Jarp, en el círculo polar Ártico, cerca de la cordillera de los Urales.
Navalni había sobrevivido en 2020 a un intento de envenenamiento con el agente químico Novichok, y su salud era motivo de creciente preocupación después de declararse en huelga de hambre entre marzo y abril de 2021, durante la cual perdió mucho peso.