Centenares de habitantes de Cite-Soleil, en el norte de la capital de Haití, huyen de sus hogares debido a la creciente guerra entre bandas que se disputan el territorio. La situación se agrava con el cierre de escuelas y la pérdida de acceso a servicios esenciales. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en la última semana al menos 2.686 personas se han desplazado por la violencia en diversas zonas de Puerto Príncipe.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó este lunes 12 de febrero de 2024 que al menos 2.686 personas se desplazaron entre el 7 y el 11 de febrero en la capital del país.
Durante ese período, los grupos armados generaron temor en el país, provocando que numerosas personas abandonaran sus hogares para ser víctimas de los enfrentamientos entre bandas rivales.
El desplazamiento forzado de los habitantes en sus áreas se volvió común, ya que las bandas armadas conquistan día tras día más territorios. Los habitantes se encuentran expuestos diariamente a tiroteos, saqueos, violaciones y a situaciones extremadamente críticas.
Unicef y la Unesco lamentaron en una declaración conjunta que, en los últimos meses, algunas escuelas cerraron por temor a quedar atrapadas en la violencia de los grupos armados, especialmente en el departamento de l’Artibonite (noroeste) y la zona metropolitana de Puerto Príncipe.
En Haití, los niños y las familias experimentan olas continuas de extrema violencia, con pérdidas de seres queridos e incendios de sus hogares.
Según un informe de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH), de octubre a diciembre del año pasado, 2.327 personas resultaron muertas, heridas o secuestradas en Haití, un aumento del 8% respecto al tercer trimestre de 2023. Y más de 8.400 personas fueron víctimas de tal violencia durante todo el año pasado.