El costo de construcción ha experimentado un aumento significativo en República Dominicana en los últimos años. Este fenómeno tiene un impacto considerable en diversos aspectos, desde el precio final de las viviendas hasta la dinámica del sector inmobiliario.

Según ACOPROVI, el índice de costo directo de la construcción de viviendas (ICDCV) ha experimentado un crecimiento continuo y significativo en los últimos años. Entre 2020 y 2023, este índice aumentó en un 25%, alcanzando un valor de 254.74 en diciembre de 2023. Esta tendencia ascendente, que abarca varios años, refleja una realidad para el sector de la construcción y para aquellos que dependen de él.

El Banco Central de República Dominicana (BCRD) también confirma este incremento en los costos de construcción, destacando su contribución a la inflación general del país. En el año 2021, se registró una variación acumulada del 8.5%, lo que subraya el impacto significativo que el sector de la construcción tiene en la economía nacional.

Costo

El costo de construcción de una vivienda está influenciado por diversos factores, entre los cuales destacan el tipo de vivienda y la ubicación geográfica. Las estadísticas revelan la complejidad del mercado inmobiliario y cómo diferentes variables pueden impactar significativamente en la construcción.

Según los datos de 2023, el costo promedio de una vivienda unifamiliar en Santo Domingo alcanzó los $3,200,000, mientras que el de un apartamento fue considerablemente menor, situándose en $1,800,000. Estos costos se explican por las diferencias inherentes en la construcción de ambos tipos de viviendas.

Las viviendas unifamiliares suelen requerir más materiales y espacio, así como un diseño y construcción más personalizados, lo que eleva sus costos. Por otro lado, los apartamentos, al ser unidades más compactas y estandarizadas, tienden a ser más económicos de construir.

La ubicación geográfica también ejerce una influencia significativa en los costos de construcción. Tienden a ser más altos en las grandes ciudades y zonas turísticas. Esto se debe a una serie de factores, como la mayor demanda de vivienda en estas áreas, la disponibilidad limitada de terrenos aptos para la construcción y los costos operativos más elevados.

En las grandes ciudades como Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, donde la urbanización está más consolidada, los precios de los terrenos y los permisos de construcción tienden a ser más altos. Por otro lado, en zonas turísticas como Punta Cana y Samaná, la demanda de vivienda impulsada por el turismo y la necesidad de infraestructuras de alta calidad aumentan significativamente el precio de la construcción.

Disminución de proyectos de construcción:

El aumento del costo de construcción en República Dominicana ha generado una serie de repercusiones significativas en el mercado inmobiliario y en el acceso a la vivienda. Este fenómeno, respaldado por fuentes confiables y cifras contundentes, merece una evaluación detallada de sus consecuencias.

Precio final de las viviendas, ha sido evidente en distintas regiones del país, como lo corroboran en 2023 ACOPROVI y el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD); en Santo Domingo, este aumento oscila entre un 10% y un 15%, mientras que en Santiago de los Caballeros y las zonas turísticas, alcanza entre un 7% y un 18%. Esta realidad repercute directamente en la dificultad para acceder a la vivienda, especialmente para las clases baja y media.

La disminución de nuevos proyectos de construcción, reportada por BCRD y ACOPROVI, está generando una reducción en la oferta de viviendas en el mercado. Se estima que entre 2023 y 2024, esta reducción podría oscilar entre un 5% y un 7%, lo que a su vez conlleva un aumento en los precios de las viviendas existentes y una mayor competencia entre compradores.

Las fuentes consultadas, señalan un cambio en las estrategias de inversión dentro del sector. Se observa un mayor enfoque en proyectos de vivienda asequible, así como la búsqueda de alternativas para reducir los costos de construcción.

¿Qué dicen los expertos?:

Esto es lo que responde el Ingeniero Héctor Bretón, especialista en Presupuesto, sobre la situación actual del sector de la construcción en República Dominicana.

¿Cuál es el impacto del costo de construcción en un proyecto de viviendas para su venta final?

El costo directo de una vivienda, que incluye materiales, mano de obra, equipos y herramientas, representa aproximadamente entre un 50 % y un 60 % del precio de venta. Si agregamos el costo del terreno, este porcentaje aumenta a entre un 65 % y un 75 % del precio de venta.

¿Cuáles son los costos indirectos de la construcción de viviendas?

Desde la perspectiva del desarrollador, los costos indirectos incluyen los costos de obra (como servicios, seguridad, almacenamiento, instalaciones provisionales, honorarios técnicos, contingencias, etc.), los costos indirectos de la oficina central (gastos administrativos), financiamiento, dirección técnica de la construcción e impuestos. Algunos desarrolladores consideran el costo del terreno como un costo directo, mientras que otros lo consideran como costos indirectos.

¿Cuál ha sido el impacto directo de la inflación en el costo de las construcciones para el año 2023?

El costo directo ha experimentado una estabilidad, ya que según el Índice de Costos Directos de la Construcción de Viviendas (ICDV) de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), ha disminuido aproximadamente un 4 %. Sin embargo, los costos indirectos y el costo del terreno han aumentado.

¿Cuál fue el impacto en el costo de las construcciones tras el conflicto con Haití en los últimos dos trimestres del 2023?

No se ha observado un impacto directo relevante.

Según los datos que maneja, ¿qué tanto ha contraído el sector debido a los costos?

La información que ha brindado el Banco Central, es que el crecimiento del sector construcción en el año 2023 ha sido casi nulo. Aunque no hay datos estadísticos precisos, las ventas se han visto afectadas debido al incremento en el precio de la vivienda.

¿Qué tipo de impacto, en términos de calidad de las construcciones, podrían tener los precios de las viviendas debido al alza de costos no controlados?

La calidad de una construcción, como una vivienda, se define por su cumplimiento con las normativas de construcción y la entrega de las características y acabados prometidos al cliente. El aumento de los costos no controlados podría llevar a un incremento en el precio para mantener la calidad comprometida con el cliente. La calidad de las construcciones realizadas por el sector formal del país no debería verse comprometida por el aumento de los costos, ya que está regida por los términos establecidos en el contrato con el comprador.

Desafíos:

El alto precio de la vivienda es un desafío significativo que afecta a numerosas familias en el país. Sin embargo, existen estrategias concretas que pueden mitigar este impacto y facilitar el acceso a viviendas dignas y asequibles.

El uso de materiales de construcción más económicos y sostenibles, como el bambú y la tierra apisonada, puede reducir significativamente los costos de construcción, según dio a conocer el estudio «Análisis del mercado de materiales de construcción en la República Dominicana» realizado por el Centro Nacional de Investigaciones Físicas (CENAFIC). Asimismo, el programa «Vivienda para Todos» del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo (MIVAH) promueve el uso de materiales alternativos en proyectos de vivienda social, logrando ahorros de hasta un 20%.

La guía «Diseño de Vivienda Social» elaborada por el MIVAH ofrece recomendaciones específicas para maximizar la eficiencia en el diseño de viviendas sociales, considerando aspectos como la orientación solar y la ventilación natural. Además, el proyecto «Vivienda Eficiente» de la Universidad Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) desarrolla prototipos de viviendas con diseños optimizados que no solo reducen los costos de construcción, sino también el consumo energético.

De otro lado, la implementación de tecnologías de construcción más eficientes puede contribuir significativamente a la reducción de los costos. Según el estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), tecnologías como la impresión 3D y la prefabricación ofrecen alternativas viables para abaratar los costos y acelerar los tiempos de construcción. El programa «Construcción 4.0» del Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) busca precisamente fomentar la adopción de tecnologías 4.0 en el sector de la construcción para mejorar su eficiencia y productividad.

Además de estas estrategias centradas en la búsqueda de alternativas, es necesario fortalecer las políticas públicas para enfrentar el problema del alto costo de la vivienda. La Ley Nacional de Vivienda y el Plan Nacional de Vivienda, establecidos por el Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, son ejemplos concretos de iniciativas gubernamentales destinadas a promover la inversión en vivienda social y reducir el déficit habitacional en el país.

Asimismo, medidas como la simplificación y agilización de los trámites de permisos y construcción, establecidas a través del Decreto 490-20 y la plataforma digital «Dominicana en Línea», pueden contribuir a reducir los tiempos de espera en el proceso de construcción. Por último, la otorgación de incentivos fiscales a la industria de la construcción, mediante leyes como la 188-08 y la 155-14, puede estimular la inversión en proyectos de vivienda y facilitar la construcción de viviendas a precios más accesibles para la población.

El impacto del aumento del costo de construcción en República Dominicana es innegable y multifacético. Desde el encarecimiento de las viviendas hasta la reducción de la oferta y los cambios en la dinámica del sector inmobiliario, todas estas repercusiones demandan una atención urgente por parte de los actores involucrados en el desarrollo urbanístico y habitacional del país.

El costo creciente de la construcción en República Dominicana ha generado un impacto significativo en el mercado inmobiliario y en el acceso a la vivienda propia.

Según datos de ACOPROVI y el Banco Central de la República Dominicana, el índice de costo directo de la construcción de viviendas ha experimentado un aumento constante, contribuyendo a la inflación general del país. Este incremento se refleja en el precio final de las viviendas, que ha aumentado entre un 10% y un 18% en diferentes regiones del país, dificultando especialmente el acceso a la vivienda para las clases baja y media.

Además, la disminución de nuevos proyectos de construcción reportada por el BCRD y ACOPROVI está reduciendo la oferta de viviendas en el mercado, lo que podría provocar un aumento adicional en los precios de las viviendas existentes.