Los residentes de Los Macos, en Los Guaricanos de Santo Domingo Norte, continúan lidiando con las secuelas de las torrenciales lluvias del pasado sábado. El lodo amarillo cubre las calles y las casas, dejando a los moradores en situaciones difíciles.
Colchones, gaveteros, lavadoras, estufas, televisores y una gran cantidad de ropa se encuentran entre los muchos artículos dañados debido a la crecida de la cañada cercana al sector, que inundó las casas hasta el techo.
Ezequiel Rosario, de 50 años, describe cómo está durmiendo en el suelo, ya que su cama y colchón están en el patio, secándose después de las inundaciones. Otros residentes muestran sus casas llenas de lodo y cuentan pérdidas significativas de bienes materiales.
A pesar de la asistencia parcial proporcionada por las autoridades locales, los residentes expresan su insatisfacción por la falta de ayuda adecuada y la poca presencia de las autoridades para abordar la situación. A tres días de las lluvias, la comunidad sigue limpiando y enfrentando las consecuencias de la devastación.