El 6 de enero de 2023, un ciudadano dominicano admitió su culpabilidad ante un tribunal federal en Boston. A raíz de participar en una conspiración para transportar grandes cantidades de heroína y fentanilo desde la República Dominicana hacia los Estados Unidos.
Se trata de Kelvin Regalado de 42 años, quién enfrenta a múltiples cargos, incluyendo conspiración para poseer con la intención de distribuir más de un kilogramo de heroína, más de 400 gramos de fentanilo y más de 100 gramos de carfentanilo. Además de estar imputado por posesión con la intención de distribuir ketamina y posesión con la intención de distribuir más de 400 gramos de fentanilo.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Regalado fue acusado en diciembre de 2020 junto a su coacusado Marcos Cabrera, mientras vivían en la República Dominicana.
Condenado a siete años de prisión

El juez Nathaniel M. Gorton del Tribunal de Distrito de Estados Unidos dictó una sentencia de siete años de prisión el 10 de mayo de 2023. Este hombre fue extraditado a Estados Unidos en mayo de 2022 después de ser arrestado por las autoridades dominicanas.
«Desde agosto de 2019 hasta marzo de 2020, en la República Dominicana, Regalado conspiró con Cabrera para entregar aproximadamente tres kilogramos de heroína y carfentanilo a testigos cooperantes en Nueva York, Rhode Island y Massachusetts. Además, Regalado organizó el envío de un kilogramo de fentanilo y un kilogramo de ketamina por correo a los testigos cooperantes en Massachusetts», indica el documento.
En enero de 2022, Cabrera recibió una condena de 87 meses de prisión después de declararse culpable por su participación en la conspiración.
Una red de pastillas con forma de superhéroes
El 29 de marzo en Nueva York, se realizó el arresto de nueve personas, cuatro de ellas dominicanos y miembros de una misma familia, por dirigir una red de tráfico de fentanilo, metanfetamina y cocaína. Esta red se dedicaba a la venta de pastillas con formas como las de Donald Trump, Mickey Mouse, Bitcoin e incluso Legos. Así lo explicó el agente especial a cargo de la DEA, Frank Tarantino III, en un comunicado.
Después de una investigación conjunta de dos años que involucró escuchas telefónicas a largo plazo sobre la fabricación y el tráfico interestatal de píldoras falsas de oxicodona que contenían fentanilo, así como la participación de múltiples agencias e investigadores, la policía logró incautar drogas por valor de $2.5 millones al desmantelar una operación de venta de drogas en varios estados. Así lo explicó la fiscal especial de narcóticos de Nueva York, Bridget Brennan.
Estas píldoras eran particularmente distintivas, algunas eran falsas de oxicodona mezcladas con fentanilo altamente letal, y se fabricaron en casi una docena de formas reconocibles, como fichas de dominó, espadas, Iron Man, Bitcoin, Legos y siluetas verdes y amarillas del ex presidente de 76 años, Donald Trump.
La mayoría de los narcóticos fueron incautados en la sala de calderas de un edificio de apartamentos en el Bronx, donde estaban escondidos. Se descubrió que uno de los sospechosos trabajaba como superintendente en ese lugar, según los fiscales.
Principales acusados y cargos adicionales
Los principales acusados en este caso son los hermanos dominicanos Edwin y Elvis Cabrera, su hermana Jennifer Durán y su tío Miguel Castillo, quien reside en Rhode Island. También están implicados Frankie Rosario, Juan De Jesus Erick Sanchez y Ruben Burgos.
Los cargos que enfrentan incluyen conspiración en segundo grado, venta ilegal de sustancias controladas en primer grado, posesión ilegal de sustancias controladas en primer, segundo, tercer, quinto y séptimo grado, posesión ilegal de un arma en segundo grado y facilitación delictiva en segundo grado. Además, José Rodríguez enfrenta una acusación separada por posesión criminal de un arma en tercer grado y posesión criminal de un arma de fuego.
Estas acusaciones están relacionadas con actividades de narcotráfico que, según los fiscales, ocurrieron en Manhattan, el Bronx, Pensilvania y Rhode Island. Durante la investigación, se incautaron más de 26,000 pastillas de fentanilo, dos kilogramos de fentanilo en polvo, aproximadamente 50,000 pastillas de metanfetamina que pesaban alrededor de 41 libras, y tres kilogramos de cocaína en polvo. El valor estimado de estas drogas en el mercado callejero es de aproximadamente $2.5 millones.
El agente especial a cargo de la DEA, Frank Tarantino III, explicó que el fentanilo y la metanfetamina están siendo comprimidos en pastillas por traficantes locales como los hermanos Cabrera, así como por los cárteles en México.
Investigación e involucrados en el proceso
La investigación, que duró dos años, inicialmente se centró en los hermanos Edwin y Elvis Cabrera, quienes supuestamente estaban involucrados en el tráfico de drogas. Más adelante, Elvis Cabrera fue encarcelado por cargos separados en el Bronx.
Durante el transcurso de la investigación, se descubrió que Edwin Cabrera presuntamente fabricaba píldoras falsificadas que contenían fentanilo, pero que se hacían pasar por oxicodona recetada. Estas píldoras se fabricaban utilizando una máquina prensadora de píldoras.
Las píldoras de fentanilo falsas representan una amenaza oculta para los usuarios que creen que están consumiendo drogas menos potentes. Los vendedores toman una decisión calculada para aprovechar la ingenuidad de los usuarios, sin importar las consecuencias mortales, según afirmó la fiscal Brennan.
La organización criminal utilizó máquinas prensadoras de píldoras que fueron enviadas por correo a Manhattan y Rhode Island para fabricar las tabletas. Se comunicaban utilizando un lenguaje codificado para discutir acuerdos para la entrega de materiales, fabricación de píldoras, posesión, fabricación, y venta de narcóticos. Muchas de las conversaciones se llevaron a cabo en español.
Durante las escuchas telefónicas realizadas como parte de la investigación, se registró que el 17 de noviembre de 2022, Edwin Cabrera le dijo a Sánchez: «Oye, tengo tres lugares para mañana». Vídeos capturan a Edwin Cabrera llegando esa noche con un bulto visible en los bolsillos de su suéter a la residencia de Sánchez en Manhattan. Sin embargo, cuando se fue unos minutos después, el bulto ya no estaba presente.
Al día siguiente, el 18 de noviembre de 2022, Sánchez subió a una camioneta Mercedes Sprinter gris con placas de Massachusetts y viajó a Providence, Rhode Island; donde supuestamente hizo entrega de narcóticos a un individuo no acusado. Posteriormente, este individuo fue detenido por miembros del FBI y se recuperaron alrededor de 3,000 píldoras que contenían fentanilo empaquetadas en tres bolsas termoselladas.
El análisis realizado por la DEA reveló que el 60% de las píldoras falsas mezcladas con fentanilo tenían una cantidad mortal de esta sustancia.