El Cuarto Tribunal Colegiado del Distrito Nacional sentenció a Santo Lora Vargas (El Pintor) a 30 años de prisión, tras ser hallado culpable del asesinato de su hijastra de 13 años de edad, en un hecho ocurrido el 16 de julio de 2023 en el sector de Villas Agrícolas.

El condenado se declaró culpable de tentativa de asesinato en perjuicio de su ex pareja y madre de la occisa. Lora Vargas deberá cumplir la condena en Najayo Hombres. Además, deberá pagar RD$5 millones a favor de la víctima.

Vargas se sentenció bajo los artículos 295 y 304 (párrafo II) del Código Penal Dominicano.

El Ministerio Público, representado por las fiscales Leydi Nayra García y Miguelina Palma, presentó pruebas testimoniales, periciales y documentales, que demostraron la culpabilidad de Lora Vargas ante el tribunal.

Sobre el hecho

El hecho ocurrió el 16 de julio del año 2023, en el sector Villas Agrícolas, aproximadamente a las 2:00 de la tarde, cuando el condenado Santo Lora Vargas, estranguló a su hijastra, la adolescente de 13 años de edad, mientras esta dormía, en ausencia de su madre.

Al llegar a la casa, Santa Angélica Paniagua Jiménez, encontró a Vargas, sentado en la cama al lado de su hija, portando una extensión eléctrica en sus manos y un pote de cloro a su lado.

Inmediatamente, Lora le pidió a la víctima su teléfono celular, a lo que esta se negó. Se sentó en la cocina, sin saber que su hija ya se encontraba muerta, fue entonces cuando el condenado le atacó con un cuchillo. Al ver la acción la víctima Santa Paniagua le agarró el arma blanca fuertemente, lo que dio inicio a un forcejeo.

Lora Vargas la lanzó al suelo, e intentó asfixiarla, mientras esta le suplicaba que no la matara y le pedía que pensara en su hija. A lo que este le respondió que ya era muy tarde, refiriéndose a que ya había matado a la adolescente.

Santa logró escapar del forcejeo y se dirigió a la habitación, donde encontró a su hija arropada, sin vida.La menor falleció debido a la asfixia mecánica por estrangulación manual, establece la autopsia.

Por su parte, Santo Lora Vargas, alias «El Pintor», salió corriendo hacia el puente Jacinto Peynado, desde donde se lanzó y cayó al río Ozama. Después de esto intento huir de la multitud que le perseguía vociferando.

Posteriormente, lo sacaron de las aguas del río, donde se arrestó por agentes policiales que habían llegado al lugar.