La reunión que tuvo lugar este jueves entre autoridades de la República Dominicana y Haití para abordar el cierre del paso fronterizo por Dajabón concluyó sin llegar a un acuerdo.

El motivo principal de la reunión era detener la excavación de un canal destinado a desviar el agua del río Masacre hacia territorio haitiano. Sin embargo, al finalizar el encuentro, el alcalde de Juana Méndez, Luma Demetrius, informó que se descubrió que la obra presenta «algunos detalles técnicos» que la hacen inviable en su estado actual.

Demetrius se comprometió a llevar esta preocupación a los campesinos responsables del proyecto, a fin de que se tomen en cuenta las observaciones y no afecten a ninguna de las dos naciones. Además, destacó la disposición de Haití para corregir las deficiencias técnicas y continuar con la construcción del canal, considerando que es un proyecto legal y necesario para la irrigación de tierras agrícolas en la línea fronteriza.

En la reunión también estuvo presente Moise Charles Pierre, gobernador del nordeste en Haití, y por el lado dominicano, Margarito de León, cónsul dominicano en Juana Méndez, y Rosalba Milagros Peña, gobernadora de Dajabón, entre otras autoridades. No se proporcionaron declaraciones por parte de las autoridades dominicanas tras la reunión.

Este encuentro surge debido al cierre por parte del Gobierno dominicano de la puerta binacional en el paso fronterizo de Dajabón, con el objetivo de detener la excavación del canal y capturar a los haitianos prófugos involucrados en un cuádruple homicidio en la comunidad de Barrera en Aminilla, provincia de Dajabón.

El Gobierno dominicano ha expresado su preocupación por los posibles impactos negativos de esta obra en los agricultores de ambos países, argumentando que el proyecto viola varios acuerdos fronterizos y tratados internacionales.