El presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), Senen Caba, ha expresado su profunda preocupación acerca de la grave situación del dengue en el país y el abrumador nivel de ocupación en hospitales a raíz de esta problemática.
Caba manifestó que los hospitales y clínicas se encuentran completamente saturados, y las personas buscan desesperadamente atención médica sin éxito. Esta situación está resultando en un aumento significativo de las muertes.
A pesar de que el gobierno niega la magnitud de las muertes causadas por el dengue, Caba insiste en que esta es una realidad innegable en el país y que se deben buscar soluciones.
El presidente del CMD resaltó que, a pesar de que se está viviendo un año de pandemia con miles de personas afectadas, el recuento oficial de muertes por dengue se limita a nueve, lo que indica una subestimación alarmante.
Para abordar esta crisis de salud pública, Caba ha instado al Estado dominicano a tomar medidas urgentes, como la habilitación de carpas y hospitales móviles para brindar atención rápida y prevenir más muertes de pacientes que no pueden recibir atención en los hospitales debido a la falta de espacio.
Otra acción apremiante, según el presidente del CMD, es la movilización de todas las instituciones del país para llevar a cabo campañas de limpieza, eliminación de criaderos y educación de la población. Todas estas medidas son cruciales para prevenir la proliferación del mosquito transmisor y la continuación de las enfermedades.
Caba expresó su profunda consternación por la difícil situación que están viviendo las familias dominicanas, y lamentó la aparente falta de acción gubernamental para hacer frente a la crisis. Ha instado al gobierno a movilizar a las Fuerzas Armadas, los municipios y los estudiantes para llevar a cabo campañas de limpieza y control de criaderos de mosquitos.
Mientras tanto, señaló Caba, existen hospitales de gran envergadura, como la ciudad sanitaria Luis Eduardo Aybar, y los hospitales Salvador B. Gautier y Francisco Moscoso Puello, que están en un estado deplorable y carecen de recursos esenciales, a pesar de ser lugares críticos para la atención médica.