Las milicias palestinas de Gaza lanzaron esta madrugada cinco cohetes hacia Israel, todos ellos interceptados por el sistema antimisiles; a lo que la aviación israelí respondió con bombardeos a dos instalaciones militares del movimiento islamista Hamás, que gobierna el enclave
«Los aviones de combate del Ejército atacaron una planta subterránea de fabricación de armas utilizada por el departamento químico de la organización terrorista Hamás, así como una planta de fabricación de materias primas para cohetes de ese grupo en la Franja de Gaza», confirmó un portavoz militar.
El ataque sobre Gaza se produce pocas horas después de que tropas israelíes comenzaran anoche la retirada del campo de refugiados de Yenín, donde lanzaron una operación militar a gran escala la madrugada del lunes, la de mayor envergadura en Cisjordania ocupada desde la Segunda Intifada, que se ha saldado de momento con 12 muertos palestinos y un soldado israelí.
«Este ataque impidió significativamente los esfuerzos de intensificación de armamento de la organización terrorista Hamás», agregó el Ejército israelí, que responsabiliza al grupo de todo lo que ocurre en el enclave.
Sin embargo, ningún grupo ha reivindicado el lanzamiento de cohetes, que activaron las alarmas antiaéreas en la ciudad de Sderot, al sur de Israel, donde una casa sufrió daños menores por la metralla emanada de la detonación de un cohete interceptado en el aire.