El empresario Miguel Arturo López (Micky) y su esposa Rosa Amalia Pilarte, diputada por la provincia de La Vega, explicaron este lunes la procedencia de sus bienes, tras las acusaciones realizadas en su contra por el Ministerio Público sobre su vinculación al narcotráfico.
En ese sentido, indicaron que parte de su riqueza, la cual asciende a más de 4 mil millones de pesos, según sus expedientes, se debe a una granja que de pollos que obtuvo desde el 1991.
En una entrevista en el programa matutino «El Día», López mencionó que tenía “las mejores granjas de ambiente controlado en el país» y que empezó en 1991 con 1,800 pollos, para 1993 tenía 10,000 y en 2003 ya contaba con 100,000 pollos semanales.
En 2009, a raíz de una crisis sanitaria, explicó que tuvo que tomar una decisión con relación a su empresa de avicultura: hacer inversiones grandes o dejarla, por lo que decidió venderla por 230 millones de pesos.
“Ahí nace el problema mío con unos impuestos dejados de pagar”, aseguró, a la par de agregar que estaba siendo perseguido por la Dirección General de Impuestos Internos (DGII).
En su intervención manifestó que para ese momento empezó a prestar dinero y para este fin usaba las cuentas bancarias de su esposa, Rosa Amalia Pilarte, por lo problemas que tenía relacionados a impuestos.
“Lo que nos mueve a venir donde ustedes, son la verdad, la injusticia y la desmoralización a mi familia” alegó de su lado Pilarte.
La legisladora precisó que tuvo ese crecimiento económico “bajo esfuerzos y sacrificios” por ser la esposa de Micky López, quien se hizo responsable de lo que pasó con las cuentas bancarias la misma.
Expediente
Se recuerda que, según el Ministerio Público, el incremento económico de López en el año 2010 ascendió a unos 23 millones 778,969.30 pesos a título personal. Las autoridades identificaron tres etapas de lavado de activos en las que López participó: colocación, estratificación e integración de los fondos al sistema financiero nacional.
Durante este proceso, adquirió apartamentos, vehículos de alta gama y movilizó dinero proveniente del narcotráfico.
El expediente presentado señala que los ingresos legítimos de López son puestos en duda, ya que su estilo de vida y actividades sociales no concuerdan con su supuesta condición de clase media baja. Se basan en pruebas materiales como fotografías y vídeos obtenidos de dispositivos móviles incautados en su residencia y empresas.