Durante su audiencia ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, Marco Rubio, nominado para ser secretario de Estado, destacó a la República Dominicana como uno de los países que mejor ha manejado los retos de la región, especialmente en su recuperación tras la pandemia de COVID-19.

El senador por Florida subrayó que, a pesar de los desafíos presentados por la inestabilidad en Haití, la República Dominicana ha logrado avances significativos.

Rubio indicó que, en su opinión, la República Dominicana se encuentra entre los países que han gestionado mejor su recuperación, destacando que la estrategia adoptada, especialmente en el sector del turismo, fue clave para el éxito del país.

«La República Dominicana no recibe suficiente atención, pero realmente ha logrado cosas positivas a pesar de los desafíos, especialmente la inestabilidad de Haití», señaló Rubio, quien también mencionó a Argentina como otro país que ha avanzado positivamente en la región.

La declaración se produjo durante una sesión en la que el senador de Virginia, Tim Kaine, cuestionó a Rubio sobre los países que considera que están avanzando positivamente y cómo Estados Unidos podría brindar apoyo a estas naciones. Rubio resaltó la necesidad de apoyar a los países que están manejando bien sus políticas internas, sugiriendo que estos esfuerzos deben ser reconocidos y respaldados.

La crisis haitiana y sus implicaciones para la región

En cuanto a la situación en Haití, Rubio dedicó una parte considerable de su intervención a describir la grave crisis política y social que enfrenta el país. Habló sobre la falta de legitimidad del gobierno haitiano y el poder de las bandas criminales lideradas por el expolicía Jimmy Chérizier, conocido como «Barbecue».

El senador advirtió que la inestabilidad en Haití no solo afecta a ese país, sino que también representa un riesgo diario para la seguridad de la República Dominicana y la región en general.

Rubio enfatizó que, aunque el esfuerzo de las fuerzas policiales haitianas para combatir las bandas es significativo, la resolución de la crisis llevará mucho tiempo y no existe una solución sencilla. Hizo referencia a la cooperación internacional, incluyendo el apoyo de El Salvador y las iniciativas lideradas por Kenia, pero subrayó que no se debe esperar una intervención militar directa de Estados Unidos.

Finalmente, Rubio abogó por el desarrollo de un plan básico de seguridad que ayude a mitigar los riesgos que la inestabilidad haitiana representa para los países vecinos, incluyendo la República Dominicana, y que a su juicio debe ser una prioridad para la comunidad internacional.