La Asamblea General de las Naciones Unidas ha oficializado el 21 de diciembre como el Día Mundial del Baloncesto, reconociendo la influencia global y transformadora de este deporte. En agosto de 2023, se adoptó la resolución A/RES/77/324 que establece esta celebración anual.

El baloncesto, al ser un deporte con una presencia mundial significativa, impacta en áreas como el comercio, la paz y la diplomacia a nivel global. Al crear un espacio único para la cooperación y el movimiento físico, el baloncesto fomenta la interdependencia y permite que los participantes se vean unos a otros como seres humanos en primer lugar.

Al igual que muchos otros deportes, el baloncesto trasciende fronteras, culturas e idiomas, sirviendo como un elemento unificador que reúne a personas de diversos orígenes. Esto facilita la creación de conexiones, el fortalecimiento de lazos y la comunicación entre individuos, contribuyendo así a la paz.

La historia del Día Mundial del Baloncesto se remonta al 21 de diciembre de 1891, cuando se jugó por primera vez en la Escuela Internacional de Formación YMCA de Springfield, Massachusetts, EE. UU. El Dr. James Naismith, un instructor canadiense de educación física, desarrolló el juego para mantener activos a sus alumnos durante los meses de invierno.

En la actualidad, el baloncesto se ha convertido en uno de los deportes más populares y practicados en todo el mundo. La Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) estima que al menos 450 millones de personas juegan baloncesto a nivel mundial. Además, ha sido parte integral de los Juegos Olímpicos desde su introducción en Berlín 1936.

El baloncesto tiene una presencia destacada en Norteamérica, Europa, Asia y otras regiones, y ha experimentado innovaciones como la creación de la Basketball Africa League (BAL) en 2019, una liga profesional con 12 equipos de clubes de toda África. Las mujeres también comenzaron a jugar baloncesto en 1892, debutando como deporte de equipo en los Juegos Olímpicos de Montreal 1976.

En la resolución de la ONU que establece el Día Mundial del Baloncesto, se alienta a Indonesia, Japón y Filipinas a ser anfitriones de la Copa Mundial de Baloncesto de 2023, un torneo en el que Alemania se llevó la victoria.