En el marco de la visita del principal opositor venezolano y presunto ganador de las pasadas elecciones presidenciales en Venezuela, Edmundo González Urrutia, el ministro de la Presidencia de la República Dominicana, José Ignacio Paliza, expresó este jueves que la postura del gobierno dominicano frente a la situación política en Venezuela se basa en principios y valores democráticos, y no en una oportunidad política específica para el país.

Paliza señaló que el respaldo a la democracia en Venezuela responde a un compromiso histórico

Recordando que en momentos decisivos de la historia de la República Dominicana, el país ha recibido apoyo de Venezuela, el dirigente político expresó lo siguiente “En los momentos más apreciados en donde la democracia dominicana moderna ha necesitado de auxilio, hemos encontrado apoyo de Venezuela, y en tal virtud hoy el Gobierno dominicano apoya que en Venezuela se pueda vivir en democracia”.

Asimismo, subrayó también el papel crucial que ha jugado Venezuela en diferentes momentos clave de la historia dominicana. Hizo especial énfasis en el recibimiento de Juan Pablo Duarte, considerado el padre de la patria, cuando fue exiliado durante el proceso de independencia, y en la postura valiente del presidente venezolano Rómulo Betancourt, quien arriesgó su vida al ofrecer su apoyo al pueblo dominicano en contra de la tiranía trujillista.

Paliza recordó además los esfuerzos del expresidente venezolano Carlos Andrés Pérez, quien en 1978 convocó a otros líderes regionales para abogar por la democracia en la República Dominicana, lo que contribuyó a poner fin a los 12 años de gobierno de Joaquín Balaguer. Este contexto histórico, según el ministro, ha cimentado una relación de solidaridad entre ambos países, basada en principios comunes de justicia, libertad y democracia.

El Gobierno dominicano, a través de estas declaraciones, reafirma su postura de apoyo a un proceso de negociación pacífica y democrática en Venezuela, buscando la restauración del orden democrático y el respeto a los derechos humanos en el país vecino.