República Dominicana, 7SEGUNDOS.– En una entrevista para 7SEGUNDOS, la bióloga Yasmin Evangelista alertó sobre el impacto que el sargazo está teniendo en las costas dominicanas que se vuelve cada vez más alarmante. Evangelista, explicó que la llegada masiva de esta macroalga está provocando un alto número de cancelaciones de reservas turísticas, debido al mal olor que desprende cuando se descompone y al deterioro del paisaje costero, donde en ocasiones se observan especies marinas muertas.
“Los sargazos están ocasionando un alto número de cancelaciones de reservas, las personas no quieren estar con el mal olor que desprende el sargazo cuando está ya descomponiéndose además, es una gran cantidad de macroalga que hay con especies muertas, nadie va a querer bañarse en esas aguas y es una gran amenaza, no solo para la biodiversidad sino también para el ingreso económico en la zona costera”, señaló.
La bióloga también destacó que, aunque hay esfuerzos por parte de universidades y empresas privadas para recolectar y dar uso al sargazo, la escala actual del problema requiere una respuesta mucho mayor. “Se necesita más integración entre el sector privado, académico y el público”.
Asimismo, la especialista también recordó que muchos de los problemas ambientales actuales, incluido el del sargazo, son consecuencia de acciones humanas. “Nosotros somos parte del problema, pero también en nuestras manos está la solución. A veces olvidamos que no es un solo país el que puede resolver esto, es un problema global”.
Potencial del sargazo como recurso comercial y sostenible
Varios países han propuesto el comercio para encontrarle una solución al problema del sargazo, como la producción de combustibles que se han ido desarrollando pero las patentes no han progresado y no han podido entrar al mercado, sin embargo, en República Dominicana hasta el momento no se conoce ninguna comercialización.
Evangelista puntualiza que, sería bueno la creación de un producto que la sociedad pueda consumir derivado del sargazo, con una producción a gran escala parecida a la que se tiene hoy en día con los plásticos , lo cual convendría más ya que serían biodegradables.
La proliferación masiva del sargazo amenaza directamente la biodiversidad marina, la actividad turística y la salud de las comunidades costeras. Aunque existen esfuerzos aislados y proyectos prometedores desde el ámbito académico y privado, la respuesta aún no está a la altura del desafío. Evangelista hizo un llamado claro, «se necesita una visión del país que transforme esta crisis en una oportunidad de innovación y sostenibilidad».