Durante la enfermedad de el anterior presidente electo democráticamente en Venezuela (Hugo Chavez), Nicolás Maduro asumió la presidencia del país, tomando posesión del cargo el 8 de marzo de 2013.

Sin embargo, varias personalidades denunciaron que según lo establecido por la Constitución de Venezuela específicamente en el artículo 233 establecía que no era «Maduro» actual vicepresidente en ese entonces quien debía asumir el cargo.

«Si la falta absoluta del presidente o presidenta de la República se produce durante los primeros cuatro anos del periodo constitucional, se procederá a una nueva elección universal, directa y secreta dentro de los treinta días consecutivos siguientes» cita el artículo.

Pese a ello, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia proclamó a Nicolas Maduro «presidente encargado» siendo proclamado presidente de Venezuela oficialmente el 14 de abril de ese mismo año sin imaginar que estarían posicionando en el poder al Gobierno más dictatorial de la historia de Venezuela.

Gobierno de Maduro

Desde el inicio del Gobierno de Maduro, Venezuela ha enfrentado innumerables crisis; social, económica y política, sin dejar de lado la delincuencia, inflación, pobreza y hambre a tal punto que la gran mayoría de venezolanos se han visto obligados a abandonar su país.

La escases, la calidad de vida y la situación económica que presentaba el país en el año 2015 a solo dos años de el sustituto de Chavez tomar el poder era latente, a tal punto que en las elecciones parlamentaria hicieron todo lo posible para revocar el mandato de Maduro mediante un referendum, dicho proceso no obtuvo resultado debido a que «Maduro el dictador» concentró el poder mediante órganos en manos del oficialismo: el Tribunal Supremo de Justicia, el Poder Electoral y las Fuerzas Armada Nacional Bolivariana.

El inicio de una irremediable dictadura

El Gobierno de Nicolás Maduro, un Gobierno autoritario y dictatorial que sumergió a Venezuela en una crisis irreparable. Suspendió el movimiento para revocar su mandato en 2016, y provocó una crisis institucional en 2017.

En el año 2018 convocó las elecciones presidenciales antes de lo establecido en la Constitución resultando reelecto por un periodo adicional de seis años donde no hubo observación internacional y además, se ejercieron tácticas que imponía a los electores que podían perder sus empleos y ayudas sociales si no votaban por Maduro.

Después de imponerse en el Gobierno por segunda vez, encarceló, exilió e inhabilitó a los lideres opositores y pese a que multiples organizaciones incluyendo la Organización de Estados Unidos Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), no reconocieron su mandato, afirmando que los comicios fueron ilegales careciendo de garantías mínimas y violentaron las normas internacionales de los procesos electorales.

No obstante, Maduro se impuso en el poder cometiendo crímenes, ejecuciones extrajudiciales y un sinnúmero de irregularidades que solo sigue contribuyendo al desplome del país.

Mientras que, para el periodo presidencial 2019-2025 la Organización de Estados Unidos Americanos aprobó una resolución donde declara ilegitimo a Maduro como presidente de Venezuela sugiriendo que se realizaran nuevas elecciones.

Por encima de todo esto, Maduro continuó ejerciendo su dictadura de Gobierno, reprimiendo, quitando la libertad, prohibiendo e impidiendo la libertad de expresión al pueblo venezolano en los diez años de gobierno.

Entonces, ¿Será que la dictadura de Maduro no tendrá fin? ¿Será que Venezuela jamás volverá a ser libre?.

La foto que demostraría el fraude en las elecciones

Las elecciones presidenciales de Venezuela han dejado al país sumido en la confusión y la desconfianza. En medio de un ambiente de euforia inicial, la proclamación de Nicolás Maduro como vencedor ha generado una fuerte polémica.

El presidente venezolano se autoproclamó ganador mientras bailaba ante sus seguidores, y declaró que «no pudieron con las amenazas y no podrán jamás con la dignidad del pueblo de Venezuela«.

Sin embargo, la oposición ha denunciado fraude de manera contundente. Edmundo González, el candidato opositor, ha afirmado que «se han violado todas las normas de manera que aún no se han hecho públicas todas las actas». La líder opositora, María Corina Machado, ha instado a los militares a «hacer cumplir la voluntad del pueblo». Las tensiones escalaron durante el recuento de votos, y la situación se volvió más crítica.

El fraude más grande de la historia de Venezuela

Los resultados publicados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), anunció la reelección de Maduro para un tercer mandato presidencial han provocado revuelo a nivel nacional e internacional.

Pese a que en la mayoría de estados venezolano la candidatura de Edmundo Gonzalez según los reportes internacionales fue arrolladora, Maduro fue declarado por el Consejo Nacional Electoral presidente por tercera vez con un 51,20 porciento para un total de 5.150.092 de los votos.

Mientras que, la líder opositora venezolana Maria Corina Machado y el candidato presidencial Edmundo Gonzalez no reconocieron el resultado anunciado diciendo «Venezuela tiene presidente electo y es Edmundo Gonzalez Urrutia y todo el mundo lo sabe».

La indignación por el cuestionado resultado electoral desató protestas en varios puntos de Venezuela, las denuncias de fraude cometido en las «elecciones o dictadura» eran latentes.

¿Cómo es posible que Maduro haya resultado electo «democráticamente» cuando el 90 porciento de los venezolanos protestan por su victoria?

Mientras que, cientos de jefes de Gobierno de diferentes partes del mundo han expresado su preocupación por el «evidente fraude» cometido en los comicios dejando como evidencia que la democracia de ese país hace tiempo pasó a ser una irreparable dictadura.

Entonces, ¿Qué es lo que tiene que pasar en Venezuela para que acabe la implacable dictadura de un Gobierno devastator que ha arruinado en diez años toda una historia y progreso de un hermoso país?