La economía de la eurozona se estancó en el último trimestre del año pasado, con un crecimiento del 0% según los datos publicados por Eurostat el miércoles. Sin embargo, hubo un aumento del 0.3% en el empleo en los países que comparten la moneda común durante el mismo período.
Estos datos confirman que la eurozona evitó entrar en recesión técnica al no registrar una tasa negativa de crecimiento en el cuarto trimestre que se sumara a la observada en el trimestre anterior. Además, la Unión Europea en su conjunto también evitó la recesión, con un crecimiento del PIB de una décima en el cuarto trimestre, en contraste con la contracción de una décima registrada en los tres meses anteriores.
A pesar de estos resultados, Eurostat estima un modesto crecimiento medio del PIB del 0.5% para el año 2023, cifra considerablemente inferior al 3.4% de 2022 y al 6% de 2021.
Acompañando el estancamiento económico, se observó una ligera aceleración en el empleo, con un aumento del 0.3% en el número de personas empleadas tanto en la eurozona como en los Veintisiete durante el último trimestre de 2023, una décima más que en el trimestre anterior.
A nivel de países, Alemania experimentó una contracción del 0.3% en su PIB en el último trimestre de 2023, mientras que otros países como Eslovenia, Portugal y Chipre registraron crecimientos significativos. Otros países como Francia, Hungría y Polonia tuvieron un crecimiento nulo del 0%. Eurostat aún no dispone de datos para algunos países como Dinamarca, Grecia, Croacia, Luxemburgo y Malta.